India: Declaración de los Socialistas Radicales sobre los resultados electorales

Los resultados de las elecciones despiertan una enorme euforia , parte de ella legítima. Las elecciones de 2024 han sido las menos democráticas de la historia de la India. El aparato del Estado, incluyendo el la parte anticorrupción, la policía política y, tácitamente, la Comisión Electoral de la India (que se negó a tomar medidas contra el Primer Ministro a pesar de su agresiva campaña comunal), se pusieron en marcha. La mayoría de los principales medios de comunicación, y en particular la mayoría de los canales de televisión, también se volcaron con el NDA, haciendo especial hincapié en Modi y en la enorme victoria que iba a obtener.

Los resultados debilitan a Modi

Los resultados electorales han asestado un golpe considerable a la reputación de invencibilidad que Modi se había construido en los medios de comunicación. El BJP, lejos de acercarse a los 350 escaños, quedó reducido a 240, y el NDA en su conjunto a 293 escaños. La mayor sacudida vino de UP. En 2019, el BJP y sus aliados habían obtenido 64 escaños, el Partido Bahujan Samaj 10 escaños, el Partido Samajwadi 5 escaños (estos dos partidos y el RLD habían formado una alianza) y el Congreso solo 1 escaño. En 2024, el BJP obtuvo 33 escaños y sus aliados 3, el SP 37, el Congreso 6, y el líder del Azad Samaj Party, Chandrashekhar Azad, que se presentaba como independiente, ganó con más del 51% de los votos emitidos en la circunscripción de Nagina de Bijnore, UP. c. En Maharashtra, la política de manipulación no dio resultado y el bloque Congreso-NCP-Sharad Pawara-Shiv Sena - Uddhav Thackeray ganó 30 de los 48 escaños. En Bengala Occidental, el CMT ganó 29 escaños, y la alianza Congreso-Izquierda ganó sólo un escaño para el Congreso, pero se llevó una gran parte de los votos anticonservadores, en lugar de dárselos todos al BJP. Las cifras de las encuestas sugieren que, en una docena de escaños, el aumento de votos de la izquierda en realidad salvó al CMT. El BJP consiguió aplastar a la alianza de la oposición y a cualquier otro partido en MP, Odisha y Gujarat (donde, sin embargo, el Congreso sólo obtuvo un escaño tras dos legislaturas).

Los objetivos del poder

Podemos decir que Narendra Modi, como líder del BJP, y el BJP, como parte clave de la combinación RSS, tenían la siguiente agenda.

1. Establecer el dominio ideológico del Hindutva. Ya se le llame fascista, de tipo fascista o posfascista, con un fuerte parentesco con el sionismo, se trata de un nacionalismo profundamente arraigado en la derecha, basado en el odio a los llamados otros y en una "nación" homogénea. También implica la imposición de un firme control sobre la educación y los medios de comunicación, y la institucionalización de los argumentos ideológicos del Hindutva.

2. Destruir, en la medida de lo posible, todos los partidos políticos y dominar aquellos que no puedan ser controlados.

3. Controlar y subvertir el poder judicial, la burocracia, el ejército y otros. Vaciar de contenido la democracia y el federalismo mientras se finge defender la Constitución.

4. Impulsar la agenda de la RSS en la sociedad civil y utilizar la violencia sistemática contra los musulmanes, pero también contra los ateos y los racionalistas.

5. Añadiendo agresiones selectivas contra los cristianos (como en Manipur) y más fuertes contra las instituciones cristianas que trabajan para los Adivasis.

Modi continuará su ofensiva

Los resultados electorales han mostrado los límites del segundo punto. El bloque INDIA fue capaz de socavar seriamente el poder aparentemente indiscutible del BJP y del propio Modi. Desde un punto de vista electoral, fue capaz de trasladar el debate a la Constitución y a ciertos aspectos de la economía, debilitando así la atracción por el BJP.

El proyecto de seguir destruyendo lo que queda de la estructura federal debe quedar en suspenso, o quizá incluso reducirse ligeramente. Las dificultades económicas han aumentado y, en estas elecciones, las cuestiones económicas han cobrado mucha más importancia, a pesar de los recurrentes intentos de Modi de comunalizarlas. En el marco social, el proyecto Hindutva tropieza periódicamente con una contradicción interna. Aunque su principal objetivo es mostrar a los musulmanes como el Otro, también es un proyecto de la casta dominante. Dado el grado sustancial de solapamiento entre la identidad de la casta oprimida y la identidad de la clase explotada, podría existir una especie de movimiento político electoral de clase.

Pero la maquinaria represiva no va a detener la marcha. Como demuestra la acción de la UAPA contra la escritora Arundhati Roy, el hecho de que Amit Shah conservara el Ministerio del Interior no fue sólo un gesto de desafío hacia los aliados. Su propósito era perseguir la represión con mayor agresividad.

Los partidos de la oposición sólo han ofrecido una resistencia esporádica al debilitamiento de las instituciones democráticas y al silenciamiento de las libertades civiles. A lo largo de la década, la Corte Suprema se ha inclinado fuertemente a favor del color azafrán, sobre todo en sus sentencias sobre el Ram Mandir y Babri Masjid. La Comisión Electoral se ha vuelto abiertamente partidista.

A partir del próximo julio entrarán en vigor nuevas leyes penales que están convirtiendo a India en un Estado cada vez más policial. Los nuevos socios del BJP no se opondrán a ellas. Habrá que esperar para ver si el bloque INDIA dirigido por el Congreso intenta lanzar movilizaciones masivas y resistencia pública contra estas leyes.

Una necesaria lucha de clase

Los resultados electorales han hecho añicos la apariencia de invencibilidad de Modi. Han abierto un espacio, y son las movilizaciones de masas independientes las que mostrarán hasta qué punto podemos resistir ahora al BJP.

La izquierda se enfrenta hoy a un reto complejo. La gran tentación para la izquierda es optar por un bloque estable con los llamados partidos de centro-izquierda. En primer lugar, se trata de un movimiento perpetuo cuando el sistema de mayoría simple, en particular, da lugar a un fuerte partido o alianza de derechas. Pero el Congreso y varios otros partidos que actualmente forman parte del bloque INDIA o que lo apoyan no son para nada centristas. La posición electoral de los Socialistas Radicales lo explicada: Desde los primeros días de la globalización, en gran capital Indio y sus economistas contratados, sus especialistas en gestión y representantes de los medios de comunicación han estado diciendo que las leyes laborales deben cambiar, que la industria debe ganar en flexibilidad y que el gran capital debe tener pleno acceso a la agricultura. El Congreso intentó todo esto, pero sólo tuvo un éxito parcial. Fue aquí donde el BJP, en el segundo gobierno de Modi, dio un impulso decisivo.

Un bloque cuyo objetivo será eliminar al BJP "a toda costa", mientras « las otras cosas vendrán después ». Se trata de un bloque que silencie o margine las demandas de los trabajadores, los campesinos, los diversos grupos oprimidos, las minorías étnicas, lingüísticas, religiosas, sexuales y de género.

A medida que la política de dicho bloque se desplace hacia la derecha, la definición de una izquierda "realista" cambiará en consecuencia, para aumentar en unos pocos el exiguo número de partidos de izquierda. Sin embargo, incluso con la formación de un bloque, es significativo que de los 9 diputados de partidos de izquierda, 7 procedan de regiones donde la izquierda ha luchado en solitario durante años.

 Si la izquierda da prioridad a la política de frente popular, esta lucha de masas independiente quedará subordinada al parlamentarismo burgués, con el objetivo a largo plazo de evolucionar hacia un sistema estable de dos bloques, donde la profundización de la extrema derecha significará que los meros paliativos tendrán una importancia exagerada. Por el contrario, combinando medios parlamentarios y extraparlamentarios, la izquierda debe tratar de resistir con más fuerza. La expansión y el éxito de las luchas fuera del parlamento serán la clave del esfuerzo por erosionar gradualmente la Hindutva.

18 de junio de 2024, traducido por Hegoa Garay

Radical Socialist