Ucrania: El autoajuste cosmético del gobierno

Los recientes cambios de personal en el gabinete ministerial ucraniano bajo el lema "Reset" muestran que el sistema neoliberal atraviesa una profunda crisis y no es capaz de corregir sus errores. La renovación de alrededor del 50% de los rostros (principalmente figuras menores) no ha estado acompañada de discusiones sobre la necesidad de revisar el curso político y social actual.

Y sin más explicaciones, está claro: la privatización a gran escala de la economía continuará, los oligarcas mantendrán su influencia en las industrias estratégicas (incluida la energía), las funciones sociales del Estado se diluirán y la gente común llevará la carga de la guerra.

Tales remodelaciones no reforzarán la legitimidad del gobierno y no enmascararán la brecha de representación entre quienes trabajan para el país y quienes se sientan en las oficinas del gobierno. El nombramiento de nuevos ministros y la destitución de sus predecesores no dan al pueblo una oportunidad real de influir en la toma de decisiones, porque todas las personas recién nombradas forman, de una forma u otra, parte del sistema político que ha funcionado bajo la influencia de los oligarcas durante muchos años.

El cambio de ministros no es una renovación, sino solo cambios cosméticos que no resuelven los problemas de fondo. Cada nueva ola de remodelaciones demuestra que no hay una verdadera rotación dentro del gobierno. El gobierno permanece cerrado a las y los trabajadores -enfermeros y mineros, ferroviarios y profesores- que podrían, cualesquiera que sean los propietarios de las empresas, oponerse al egoísmo capitalista que ha llevado a Ucrania a un callejón sin salida. Sienten en masa la injusticia y los horrores de la guerra, por lo que están decididos a hacer cambios en interés de la mayoría de la sociedad: abandonar las deudas externas y gravar el lujo, apoderarse de la riqueza ilegalmente apropiada y exportada y tomar otras medidas para alimentar los fondos salariales, desarrollar la infraestructura social y hacer que el país sea más seguro. Solo la autoorganización de las y los trabajadores en el contexto de una desoligarquización y socialización radicales puede dar el impulso necesario para un cambio real. Solo las personas de la clase trabajadora pueden traer la liberación al país y aportar una nueva calidad a la política.

El Movimiento Social declara que solo los sindicatos de trabajadoras y trabajadores curtidos por los conflictos de clase nos permitirán construir un Estado justo en el que todas y todos tendrán voz política, y no solo las y los representantes de las élites parasitarias.

06 de septiembre 2024

Traducido por vientosur

 

Sotsialnyi Rukh